Publicador de contenidos


La pobreza y la riqueza, dos caras de la misma moneda


18 octubre de 2024

Da miedo consultar el Informe de pobreza en las Islas Baleares 2024 que hoy ha hecho público la Red para la Inclusión-EAPN, presentado hoy en el Parlamento, especialmente cuando observamos que las políticas públicas (del color que sean) son claramente insuficientes para hacer frente a una situación que ya es insostenible.

Que la riqueza está mal repartida lo sabemos todos, pero, aunque alguien me pueda acusar de demagogia, cuando veo estos datos y escucho las noticias no puedo evitar recordar alguna información para que TODOS y TODAS nos miremos en el espejo de la realidad y nos hagamos algunas preguntas.

¿Cómo es posible que el premio para el ganador de un torneo de tenis (solo dos partidos) sea de 7 millones de euros? ¿O cómo es posible que se paguen fortunas por los servicios de un jugador de fútbol?... mientras otras personas no tienen, literalmente, una comida decente que llevarse a la boca o un techo donde refugiarse. Esto sin hablar, en otro nivel, de fraudes como el del diésel valorado en 1.900 millones de euros, en el que parece que probablemente los responsables reales nunca pagarán por el delito, si los encuentran.

La pobreza y la riqueza van de la mano, y cuando se produce un desequilibrio entre ambas, la distancia entre clases aumenta y ocurren situaciones como las que vivimos actualmente. La pobreza no disminuirá mientras quienes tienen la riqueza no estén dispuestos a consentir una distribución más adecuada, al menos para que la vida del conjunto de la población cumpla con unos mínimos. El informe presentado hoy nos mostraba que, a pesar del incremento de los ingresos de renta per cápita, esto no se ha reflejado en el bienestar general, y también nos recordaron que caer en la pobreza está a la orden del día para algunos que nunca lo hubiéramos pensado.

¿De qué sirve tener el derecho a la vivienda si no tenemos dinero para comprar o alquilar una vivienda digna porque la especulación del mercado ha elevado los precios a límites inalcanzables? La historia nos ofrece muchos ejemplos de que cuando se llega a estos extremos, se generan momentos críticos y, a veces, convulsos, con consecuencias no deseadas por nadie.

En fin, desde las administraciones hacen falta políticas que hagan entender a quienes corresponda que la redistribución de la riqueza es buena para todos, y que si seguimos por este camino, todos sufriremos las consecuencias de nuestra avaricia.

Cuando hablamos de POBREZA también debemos hablar de RIQUEZA, no podemos acabar con la sed si no tenemos agua. Es responsabilidad de todos y todas.


Fecha última modificación: 22 de octubre de 2024